En el interior de los sistemas hay cribas de disco que pueden separar grandes cantidades de materiales pretratados, como residuos industriales, voluminosos y húmedos.
Estas máquinas proporcionan un gran caudal de material y su amplia gama de accesorios intercambiables garantiza una selección muy precisa. También pueden transportar materiales extraños pesados.
Los rodillos, cuidadosamente diseñados, son muy resistentes al desgaste y garantizan una gran fiabilidad a lo largo del tiempo. Los ejes de cribado están divididos en rodillos de entrada y salida, con formas diferentes y transmisión independiente. Esta característica única distribuye mejor el material en toda la superficie de cribado.
Las cribas de discos están compuestas por rodillos de paso constante en los que se insertan diferentes discos poligonales en función del material a procesar. El material se desplaza mediante la rotación de los ejes de los discos poligonales y también se agita enérgicamente. De este modo, se mejora el cribado/división entre materiales pesados y ligeros, y entre materiales grandes y pequeños. El inversor de control de velocidad de los rodillos mejora y calibra mejor la separación de los materiales. Así, el operador aumenta y disminuye la velocidad mediante un potenciómetro para encontrar el equilibrio perfecto.
Unos insertos especiales soldados al eje permiten que el material grande se desplace por inercia hacia el siguiente disco, evitando así que el material caiga en la criba inferior.
Las cribas de disco de Camec son fáciles de mantener, ya que están diseñadas para facilitar el montaje de las piezas sujetas a desgaste. Los ejes son fáciles de lavar mediante lavadoras de alta presión, mientras que cualquier material que se enrede alrededor de los ejes puede eliminarse mediante sistemas térmicos, ya que los rodillos son muy gruesos.
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