Este tipo de juntas admiten desplazamientos axiales y radiales de vástagos/émbolos simultáneamente (como un tornillo de Arquímedes) y hasta 350 bar de presión.
Según su perfil, las juntas rotativas son de doble efecto o de simple efecto.
Configuraciones:
Las de doble efecto están constituidas por un anillo de cierre de baja fricción y una tórica como elemento energizante, y además admiten presión por ambos lados.
Las juntas rotativas de simple efecto son collarines de labios energizados con muelle y pestaña de sujeción con servicios de cierre interior.