La mezcla de gases es otra alternativa al corte con nitrógeno u oxígeno puros, en la que se utiliza una mezcla específica de esos dos gases. Este proceso se comporta de forma muy similar al corte con nitrógeno; sin embargo, la adición de una pequeña cantidad de oxígeno aumenta la energía disponible en el corte. Esta mezcla permite aumentar la velocidad de corte en comparación con el corte con nitrógeno a la misma potencia de láser (hasta un 30% más de avance lineal) y, al mismo tiempo, reduce la formación de rebabas, lo que da como resultado un filo de corte de mejor calidad en aceros suaves (al carbono) más gruesos. Además, la energía adicional de esta mezcla de gases en comparación con el corte por fusión puro con nitrógeno permite ampliar la gama de
espesores que podemos procesar con la potencia láser disponible. Materiales que antes habrían necesitado oxígeno pueden procesarse ahora con gas mezclado a mayor velocidad y con una calidad excelente.
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