Modernas máquinas de mecanización CNC se encargan del rectificado de los perfiles de los rotores y de las ruedas dentadas con una precisión milimétrica. Las distancias mínimas que se consiguen entre los bordes de los rotores y la carcasa de la soplante garantizan un rendimiento volumétrico máximo con el menor calentamiento posible del bloque. Como el bloque se calienta poco, es posible mantener temperaturas finales de compresión de hasta 160 °C. Todas las carcasas y los rotores se calibran para garantizar que están dentro de las tolerancias permisibles.