Los transformadores monofásicos suelen diseñarse con un núcleo en dos patas o una pata única con dos patas de retorno o patas auxiliares del núcleo. La aplicación más común de los transformadores monofásicos son los sistemas ferroviarios. Sin embargo, también fabricamos transformadores para sistemas de potencia que se configuran como tres unidades monofásicas, que finalmente se conectan a un sistema trifásico in situ. Estos transformadores pueden llenarse con aceite mineral, natural o líquidos de éster sintético.
Los transformadores trifásicos representan el mayor segmento de la industria de transformadores y se diseñan para cumplir especificaciones y requisitos concretos de los clientes. A pesar de las numerosas variantes de diseño, algunos ejemplos notables son los transformadores de dos devanados, los transformadores de tres devanados, los transformadores con conmutación de tensión en el lado de baja tensión o de alta tensión, los transformadores con devanados de estabilización, los transformadores para generadores, etc. Estos transformadores pueden llenarse con aceite mineral, natural o líquidos de éster sintético.
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