La criba vibratoria estándar, es decir, la criba inclinada, es el equipo de clasificación preferido en los procesos de trituración y cribado, que se coloca inclinada sobre un chasis fuerte y de alta resistencia y realiza el movimiento de vibración sobre muelles que pueden absorber la carga determinada.
CRIBA INCLINADA
Las cribas inclinadas son muy importantes para todos los procesos minerales. El proceso de agrupar el material a granel que contiene piezas de diferentes tamaños en al menos dos rangos de tamaño se denomina cribado. El proceso de cribado se denomina "proceso de clasificación" en los procesos minerales.
En el cuerpo del tamiz se fijan paneles de cribado con mallas de tamaños específicos. Mientras el material alimentado se desplaza por el panel de cribado con la vibración del cuerpo, los trozos más pequeños que la abertura de malla pasan a un panel de cribado inferior con un tamaño de malla menor para ser cribados de nuevo.
DISEÑO
Los tamices inclinados son los equipos más utilizados para el proceso de clasificación. Consta de un cuerpo de tamiz, un mecanismo de accionamiento y un sistema elástico. El cuerpo aloja el mecanismo de accionamiento y los paneles de cribado.
Los paneles de cribado están unidos tensamente a unas estructuras denominadas carcasas de cribado. Las carcasas del tamiz están diseñadas para dar a los paneles una forma de espiga. Los bastidores también proporcionan la rigidez del cuerpo.
El mecanismo de accionamiento es la parte más importante de la criba. La fuerza centrífuga creada por la rotación de las pesas excéntricas conectadas a los dos extremos del eje del tamiz a una velocidad determinada garantiza que el cuerpo del tamiz realice un movimiento de vaivén continuo sobre el sistema elástico. Gracias a este movimiento oscilante, es decir, el movimiento de vibración, se consigue que el material se desplace sobre el panel.
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