¿El mundo digital todavía necesita conectores? Más que nunca, dice el Grupo Lapp. Los retos que plantean la globalización, la digitalización, la sostenibilidad y los cambios demográficos no escatiman esfuerzos, ya que la industria 4.0 significa que la producción es cada vez más modular y flexible. Los fabricantes de automóviles ya están probando escenarios en los que las estaciones de mecanizado son móviles y buscan por sí mismas las piezas que se van a mecanizar. La cuestión es si esto hace que los cables y conectores sean redundantes. Nada más lejos de la realidad. "Los cables y, en particular, los conectores serán indispensables durante mucho tiempo. En todo caso, es probable que su importancia aumente", afirma Matt Ansell, director de productos de Lapp Group UK. Incluso si la comunicación inalámbrica produce ciertos cambios, seguirá estando limitada a aplicaciones especializadas en la planta de producción. Los cables son indispensables para que las máquinas puedan comunicarse entre sí de forma rápida y libre de interferencias, como por ejemplo para transmitir datos de los sensores en tiempo real, o para suministrar energía a los sistemas de accionamiento.
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