IREM SPA

Quiénes somos

De cine a la eco-energía y a la rejilla eléctrica: la evolución de la confiabilidad

IREM fue establecido en 1947 en S. Antonino di Susa, un pequeño distrito situado en treinta kilómetros al oeste de Turín, gracias a la creatividad y a la cordialidad de su fundador, Mario Celso.

Afilado de electrotechnics y de cine puesto que él era joven, en el final de los años 40 Mario Celso tuvo éxito en realizar su sueño alcanzando el primer rectificador electromecánico para los arcos de carbono usados para las proyecciones del cine. De este primer rectificador, una línea de productos completa dedicada a la fuente y la ignición de lámparas de descarga tomaron el formulario.

En los años 50 la producción de centrales hidroeléctrico micro comenzó. Las turbinas pueden generar la energía eléctrica que explota la cabeza y el flujo de las corrientes del agua.

En la década próxima la producción ampliada con los reguladores de voltaje, una gama que desarrolla rápidamente gracias al crecimiento de la electrónica y de la informática.

En el final de los años 80, consciente del ahorro de la energía y de los gracias a la gran experiencia adquirida en el control de la fuente eléctrica, IREM comercializó una gama de nuevos productos destinada para optimizar a la gestión de iluminación: los reguladores del flujo luminoso.

En 1992, en Los Angeles, Academy of Motion Picture Arts and Sciences para su contribución al desarrollo de la industria cinematográfica concedió Mario Celso el “premio científico-técnico”.

La compañía ha desarrollado gracias a la innovación tecnológica de las cuatro líneas de productos labra para ganar una posición principal en diseño, la fabricación y ventas del equipo eléctrico y electrónico para el control de fuente eléctrica, actuando en los sectores siguientes:
- El accionar de las lámparas de descarga para los usos profesionales;
- Protección de usuarios eléctricos contra la línea disturbios;
- Regulación del flujo luminoso en la iluminación de las plantas;
- Producción de energía por las turbinas hidroeléctricas.

Nuestros valores

Energía positiva, sin la interrupción. Desde 1947.

La calidad es nuestra primera responsabilidad y la satisfacción del cliente nuestro orgullo. El respecto por el ambiente es nuestro propósito social y la seguridad y sanidad humana es nuestro deber.

La calidad, la seguridad y el ambiente son, en primer lugar, compromisos de IREM que la compañía ha perseguido desde su fundación como tierra de su organización y desarrollo.

Nuestro trabajo duplica la idea de la continuidad que comienza con la optimización de la productividad, para maximizar eficacia y entra encendido en los dispositivos para la producción de ahorro de la energía de la energía renovable y de la iluminación.