Los vibradores externos de alta frecuencia se utilizan en obras y en plantas de fabricación de prefabricados para obtener productos de alta calidad hormigón visto, con excelentes resultados estéticos y resistencia a la intemperie. La vibración se transmite al hormigón de forma indirecta a través de encofrados o moldes.
Al igual que los vibradores internos, los externos también se basan en el principio de la vibración producida por la rotación de una masa excéntrica accionada por
un motor eléctrico trifásico.
La vibración de baja velocidad (3.000 rpm) se utiliza principalmente en hormigones de alta densidad y no reactivos, como permiten un rápido desplazamiento de
los agregados.
Se recomienda vibración de alta velocidad (6.000 o 9.000 rpm) en hormigones de baja densidad y en aplicaciones donde se
requiera alta calidad superficial.
La posibilidad de ajustar tanto la frecuencia como la velocidad (de 0 a 9.000 rpm) garantiza conseguir la frecuencia de funcionamiento perfecta. Depende del
tipo de hormigón a vibrar así como de la frecuencia de resonancia natural del molde.