La alúmina es el material cerámico técnico más utilizado. Gracias a su excelente aislamiento eléctrico, rigidez dieléctrica y resistencia a altas temperaturas de hasta 1.500 °C, la cerámica de alúmina es ideal para aplicaciones eléctricas y de alta temperatura.
La cerámica de alúmina se caracteriza por:
Buena resistencia mecánica
Buena conductividad térmica y resistencia al fuego
Buena resistencia a la corrosión y al desgaste
Muy buen aislamiento eléctrico
Los sustratos de alúmina también poseen varias características únicas:
Buena superficie con gran lisura/planeza y menos porosidad
Alta resistencia al choque térmico
Bajo alabeo y combadura
Estable a temperaturas muy altas y a productos químicos corrosivos
Resistencia a la rotura y variación de forma/dimensión muy estables
Aplicaciones:
Resistencia de red, Resistencia de chip, Conjunto de resistencias de chip, CI híbrido de capa gruesa, CI híbrido de capa fina, Aislador general
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